Relatos iniciáticos: Experiencias con el Inframundo

Experiencias de mi viaje a Costa Rica

Relatos iniciáticos

Mes de marzo, tiempo de equinoccio, el orden natural se establece en la perpetua armonía que el cosmos nos establece, dando espacios para crear. Es un momento ideal para iniciar nuevas prácticas espirituales.

Reunidos ya para iniciar los trabajos Rosacruces se anuncia que es tiempo de ponernos en contacto con seres poderosos del mundo interno. La idea era realizar estos contactos por espacio de 30 días continuos para verificar su efectividad. Se realizaría la evocación de un particular Ser del inframundo y tener la experiencia de penetrar los velos del espacio interior donde se guardan las energías de las experiencias más difíciles, más oscuras, traumáticas muchas de ellas todavía por resolver. Se haría una primera preparación cabalística, para seguidamente realizar el llamado. Al final utilizando una formula Gnóstica Cristiana se saldría de ese plano.

Las primeras experiencias fueron impactantes. El estar frente a la oscuridad era muy angustiante. Se sentía un fuerte peso y varios de los participantes expresaron sentir miedo. Las visiones giraban todas en relación a un lugar oscuro donde no se podía percibir nada más. La cadena energética cada día se fortalecía y las visualizaciones comenzaron a esclarecerse. Primero todos se contactaron con el Ser que se evocaba, pudiendo no solo percibirlo sino verlo.

El inframundo representa entre otras cosas el astral inferior personal. Todas aquellas energías que no se ha podido superar. Es un lugar lúgubre, denso y desagradable donde las visiones más oscuras se encuentran.

Los participantes del trabajo espiritual ya lleva 14 días realizándolo. Cada uno según su interno proceso ha experimentado distintas experiencias. Uno de ellos se conectó con túneles negros que lo llevaban a otros espacios donde se encontraba con símbolos sagrados como runas o pirámides. En varias ocasiones vio el ser que se evocaba, sintiéndolo en un principio aterrador y después como un guardián.

Ya la unión con ese ser era más tolerable y se podía trabajar de otra manera sin miedo.

El inframundo es conocido por todas las culturas y es tratado de comprender por todas ellas. Los Egipcios realizaban elaborados mapas con la esperanza de sortear todos los peligros del mundo después de la muerte y llegando al juicio final, donde su corazón seria pesado contra una pluma, poder gozar de las delicias de una vida en un mundo hermoso. Para el cristianismo este mundo corresponde al purgatorio. Un terrorífico lugar donde se imparte castigo al pecador encadenándolo al sufrimiento. Un lugar al que van a purgar pena los condenados.

Todas esas creencias son solo eso, creencias, cada uno individualmente basado en las experiencias vividas, tendrá un paso distinto por el inframundo. La altura conciencial espiritual conseguida durante su paso por este mundo tridimensional, hará que esta experiencia en el inframundo sea más o menos compleja.

Nuestro trabajo lleva 22 días, el egregor se ha conformado con fuerza y el contacto se hace con facilidad.

Otro de los participantes expresa que durante una visión ve un féretro, al acercarse se da cuenta que es su propio cadáver con una edad muy avanzada. Luego nos relata que ve una procesión conformada por sacerdotes pertenecientes al grupo de Ser que se está evocando. Al final de la procesión una figura inmensa que aducía al inframundo. En otra ocasión nos relata este participante, que el Ser evocado se le acercaba en aptitud de pregunta, algo así como ¿Para qué me está llamando?

Ya en esta etapa no solo se veía el ser, sino que se tenía la posibilidad de establecer comunicación. Interesante todo lo que esta comunicación aporta.

Nos comenta otra persona que participa que sintió la necesidad de trabajar con sus antepasados, limpiando energías que obstaculizan el avance familiar. Durante varios días vio a sus antepasados muertos y tuvo la oportunidad de cerrar experiencias pasadas. Al final vio que ellos entraban a una puerta a la cual no tuvo acceso.

Otro de los participantes primeramente centro su atención en el trabajo cabalístico que se realizaba. Su atención se fijaba en la luz y como se movía en la medida que el trabajo se realizaba. Le interesaba verificar hasta que nivel podía percibir con claridad la luz y como cambiaba desde los planos inferiores hasta lo más alto. Se le hacía difícil entrar en el inframundo, al principio lo evitaba hasta que se decidió a vivir la experiencia.

No aconsejo realizar estas prácticas sin una guía fortalecida ya que pueden llegar a ser peligrosas.

Muchas más experiencias se vivieron durante esos días, pero deben quedar en el silencio.

Ya finalizado el trabajo uno de los participantes viaja a México por unos días. Yo me encontraba recibiendo la visita de un querido amigo que llego a compartir unos días. Cuando llega de México la persona me sorprende con dos piezas artesanales que hacían alusión al Ser invocado en el trabajo. Consisten una en un pequeño sarcófago con la figura en el frente, la otra una talla de madera.

Mi visitante amigo se prendió de las dos piezas queriendo llevárselas para su casa en Miami yo lo complací y así se hizo. Estando allá las dos piezas me envía una fotografía del lugar donde las había colocado.

Ya de regreso en mi país recibo una llamada de este gran amigo donde me relata que está reunido con su familia comentando que ha tenido sueños donde se ve en un cementerio oscuro entre muertos y que su hija también sueña que un perro negro ataca sus perros y los quiere matar. Me dice que ya no quiere las estatuillas y que me la envía para que yo los conserve.

El trabajo con los seres del mundo interno es fascinante. Los estudiantes Rosacruz siempre buscamos la luz y hacemos el bien. El inframundo es un lugar que debemos vencer dentro de nosotros mismos.

Ing. Fernando Melean. ( Albirus R+) Abril 2019